El garbanzo es la semilla de la planta del garbanzo. Una planta leguminosa (Cicer arietinum) originaria de Turquía.
Son muy energéticos, nutritivos y contienen muchas vitaminas, minerales, proteínas y fibra, que aportan diversos beneficios a nuestro organismo.
El garbanzo tostado y salado es un carbohidrato que contiene almidón, esto hace que la glucosa sea consumida lentamente por nuestro organismo, por lo que ayudan a reducir el azúcar en sangre.
Gracias al hierro, fosfato, calcio, magnesio, manganeso, zinc y la vitamina K que contienen, ayudan a fortalecer los huesos y a mejorar el sistema inmune.
Ayudan a disminuir el colesterol, por lo que proporciona una mejor circulación evitando enfermedades cardiovasculares.
Gracias a la fibra, el garbanzo tostado y salado previene el estreñimiento y mejora los procesos digestivos.
Sus niveles de hierro los hacen recomendables para las personas que padecen anemia.
Son ricos en proteínas y, por lo tanto, saciantes y reconstituyentes, lo que los convierte en un snack muy saludable que hay que tener en cuenta en dietas de adelgazamiento.
El garbanzo tostado y salado se suele consumir como aperitivo.