La almendra con piel frita y salada es de la variedad largueta, cultivada en España.
Es una almendra fina y alargada de sabor menos dulce que otras variedades, que al tostarla queda potenciado su sabor, obteniendo un aperitivo delicioso.
Este fruto seco es rico en vitamina E y magnesio, además de aportar potasio, calcio, fósforo, zinc, hierro, fibra, proteínas y grasas saludables.
El consumo moderado de la almendra con piel frita y salada, nos aporta propiedades saludables para la piel, el sistema circulatorio y el aparato digestivo, además de ayudar a prevenir enfermedades cardíacas.
La almendra con piel frita y salada se consume principalmente como aperitivo.